Liberar el poder de las plantas para purificar aguas residuales —sin tuberías, bombas u otro elemento artificial— ha sido la clave del éxito para la compañía israelí Ayala Water & Ecology durante 26 años.
Ya hay cientos de sistemas de fitorrecuperación de Ayala integrados en zonas industriales, residenciales, agrícolas y de ocio en Israel, India, Chile, México, Francia, Alemania, Grecia, Singapur, Estados Unidos y Canadá. Se planean más para Filipinas y el Reino Unido.
En estos momentos, esta alternativa “verde” y sostenible está más de moda que nunca, como lo demuestra el entusiasmo generado por la presencia de Ayala en la reciente WATEC Expo en Tel Aviv.
En entrevista con ISRAEL21c, Eli Cohen, jefe ejecutivo y fundador de la compañía, dijo que muchos de los visitantes que buscaban información en el evento sobre el uso de plantas para limpiar el agua provienían de California, donde una severa sequía ha despertado interés en tecnologías del agua desarrolladas en Israel.
Nacido en Haifa, Cohen dijo que en 1988 abandonó una carrera en alta tecnología y compró terreros de uso agrícola en el Moshav Tzipori, en Galilea, para cultivar y vender plantas acuáticas orgánicas para usos ornamentales y como filtros naturales en acuarios marinos.
Cohen pronto se dio cuenta de que podía ofrecer un sistema tecnológico sin costo energético para crear un ecosistema equilibrado de purificación de agua que no necesita mantenimiento, excepto por la poda que cualquier jardín requiere.
“Lo llamamos ‘paisajismo activo’. Cualquier persona puede tener una depuradora propia en el parque o el jardín y utilizar el agua purificada para el riego”, dijo Cohen. “Uno mismo puede producir agua de alta calidad con un sistema natural si crea un entorno adecuado con plantas, grava y suelo, además de aditivos naturales para tratan problemas específicos, tales como restos de metales pesados o elementos radioactivos. Si se hace de forma natural, puede durar para siempre”. Sigue leyendo en Israel21c