Como parte de este plan, habrá centros de comercio y empleos a escala mundial, edificios públicos, escuelas, nuevas carreteras, parques vecinales y más. La escala de construcción de viviendas, comercios, oficinas y hoteles sugerida por el plan es de un alcance del 40% del área incluida en el plan, de modo de preservar amplias áreas públicas para el beneficio de los residentes.
La Municipalidad destaca que, los vecindarios árabes en Jerusalén Oriental, crecieron y se desarrollaron en las últimas décadas sin un plan maestro o un esquema que permitiese la organización de todos los aspectos de la vida en los vecindarios (construcción legal de viviendas, destinar tierras para propósitos públicos, de comercio y empleo, la organización del sistema de carreteras). La falta de planeamiento llevó a un fenómeno generalizado de construcción ilegal, que se estima, hasta la fecha, en 20.000 construcciones ilegales; algunas fueron edificadas en áreas destinadas a uso público. La construcción ilegal implicó que muchos residentes no pagaran los impuestos requeridos, los cuales a su vez permiten a la Municipalidad invertir recursos en infraestructura pública. Además, la falta de registro de tierras y propiedad en amplias áreas de los vecindarios de Jerusalén Oriental hizo más difícil la administración de una política de planeamiento y ejecución.
A la luz de esta falla sistémica, el Alcalde decidió tomar una iniciativa proactiva a fin de facilitar un cambio significativo. El Alcalde instruyó a profesionales de la Municipalidad para que faciliten un plan integral, para todos los vecindarios de Jerusalén Oriental, que incluye un sistema de carreteras, edificios públicos y áreas abiertas, la reorganización de edificios ilegales y la legalización de edificios de acuerdo al plan maestro.
Como parte del marco del nuevo plan, la Municipalidad asistió con la legalización y una rápida autorización de muchas estructuras en Jerusalén Oriental, y avanzó en la planificación de edificios públicos, carreteras, zonas de estacionamiento, áreas verdes y áreas públicas. Además, por primera vez en décadas, el Concejo de la Ciudad de Jerusalén designó nombres de calles y números de edificios para todas las estructuras en Jerusalén Oriental. Los nuevos nombres de calles y numeración de edificios mejoran, de manera drástica, la capacidad de servicios de emergencia y rescate, para que puedan llegar a los vecindarios, la posibilidad de los residentes de recibir correo, y de los visitantes de encontrar el camino dentro del vecindario. La nueva “ID” (identificación) de los edificios en Jerusalén Oriental hace posible la clara conexión entre un residente y un edificio. De este modo, se refleja en la necesidad de los residentes de cumplir con sus obligaciones hacia las autoridades (el pago de los impuestos municipales, por ejemplo) y facilita la capacidad de regular sistemáticamente la construcción ilegal.
Traducción: Cidipal