Hubo 26 países que se abstuvieron de votar, incluyendo Serbia y Turkmenistán, mientras que 24 países apoyaron la iniciativa y seis votaron en contra. Cabe señalar que ni un solo país europeo votó a favor de la iniciativa.
Francia, Suecia, Eslovenia, India, Argentina y Togo en un primer momento iban a votar a favor de la resolución que dice que los judíos no tienen conexión con Jerusalén, pero al final fueron convencidos de abstenerse de votar.
EE.UU., el Reino Unido, Lituania, Holanda, Estonia y Alemania votaron en contra de la resolución respaldada por los palestinos.
En un medida inusual, el jueves por la tarde Israel buscó la ayuda de la Santa Sede para impedir que la UNESCO adopte una recomendación palestina negando cualquier conexión judía con Jerusalén y el Monte del Templo, con el argumento de que también perjudicará a los cristianos.
Los palestinos han exigido que una delegación de expertos internacionales sea enviada a los lugares sagrados para examinar lo que han descrito como la destrucción del patrimonio histórico y arqueológico por parte de Israel. Alegan que esto se ha llevado a cabo de varias maneras, incluyendo la construcción del tren de Jerusalén y excavaciones arqueológicas.
Israel, junto con Estados Unidos, ha estado trabajando en las últimas semanas para reducir el apoyo de la mayoría dentro de la junta ejecutiva de la UNESCO. Francia, que apoyó a los palestinos en abril, se comprometió a votar en contra de esta propuesta.
Los palestinos buscan, entre otras cosas, designar un observador permanente de la UNESCO en Jerusalén y lograr una serie de condenas de las actividades israelíes, tales como la supuesta demolición de una escuela en Kfar Adumim. (Israel afirma que lo destruido fue una casa rodante en ruinas y “no una escuela”.
La Santa Sede tiene la condición de observador sin derecho a voto en la UNESCO, aunque su jefe de delegación, Mons. Francesco Follo, es una parte de la dinámica detrás de la escena. Israel ha tratado de convencer a la delegación católica que los palestinos están trabajando para que se ignore no sólo la conexión judía con la capital de Israel, sino también la conexión cristiana.
El embajador israelí designado ante la Santa Sede, Oren David, contactó al Subsecretario de Relaciones con el Estado del Vaticano, Antoine Camilleri, sobre el asunto y le pidió a la Santa Sede trabajar para convencer a los estados miembros de la UNESCO que no apoyen la iniciativa palestina.
El delegado permanente de Israel ante la UNESCO, Emb. Carmel Shama Hacohen, comentó: “Israel y el pueblo judío no requieren la confirmación de la UNESCO, o de cualquier otro país, sobre la conexión especial entre el pueblo judío y el Estado de Israel y Jerusalén, en general, y sobre los lugares sagrados dentro del mismo, como el Muro Occidental y el Monte del Templo, en particular”.
El embajador continuó: “No hay ninguna conexión de otro pueblo con otro lugar en el mundo que se acerque a la solidez y la profundidad de nuestra conexión con Jerusalén desde una perspectiva religiosa, histórica y nacional, una conexión que ha superado la prueba de 2.000 años”.
El Presidente Reuven Rivlin comentó el jueves por la mañana, “No hay festividad más conectada con Jerusalén que Sucot. Todas las festividades de Israel ponen de relieve el vínculo indisoluble que existe entre nuestro pueblo y nuestra tierra, y ningún foro u organismo del mundo puede venir y negar la conexión entre el pueblo judío, la Tierra de Israel y Jerusalén – y cualquier organismo que lo haga sencillamente se avergüenza a sí mismo”. Rivlin agregó: “Podemos entender la crítica, pero no se puede cambiar la historia”.
Shama Hacohen reconoció que los palestinos gozan del apoyo de una mayoría automática y explicó que su objetivo era ampliar lo más posible el número de los que se oponen. “Estamos movilizados para erosionar y abrir una brecha en la mayoría automática que ha estado en contra nuestro durante los últimos dos años”, explicó. “Los esfuerzos, realmente, están dando sus frutos: De la situación en que estábamos cuando solamente EE.UU. votaba por nosotros, hemos aumentado gradualmente el número a seis países, y también aumentó el número de abstenciones.
El Delegado Permanente de EE.UU. ante la UNESCO, Emb. Crystal Nix-Hines, ha explicado antes a la junta ejecutiva de la UNESCO que las decisiones unilaterales sobre Medio Oriente han hecho más difícil para la administración estadounidense reanudar el pago de sus cuotas de afiliación a la UNESCO. Shama Hacohen explicó que el Congreso de Estados Unidos ha bloqueado los esfuerzos del Presidente Barack Obama para reanudar los pagos, unos €80 millones al año, porque tanto los Republicanos como los Demócratas se han opuesto a las decisiones de la UNESCO relativas a Jerusalén.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel ha publicado un folleto sobre la histórica conexión judía con Jerusalén, que se ha distribuido a todos los 120 delegados permanentes ante la UNESCO, cuyos países tienen relaciones diplomáticas con Israel.
Traducido para porisrael.org por José Blumenfeld