El papa Francisco llegó este domingo al aeropuerto internacional de Tel Aviv, en Israel, tercera etapa de su visita a Tierra Santa.El pontífice llegó a bordo de un helicóptero militar jordano y fue recibido por el presidente de Israel, Shimon Peres, y el primer ministro, Benjamin Netanyahu.
El papa expresó este domingo al llegar a Israel su "profundo dolor" por el atentado contra el Museo Judío de Bruselas que causó la muerte de cuatro personas, entre ellas dos israelíes.
En su discurso de llegada, el pontífice argentino condenó también "el antisemitismo", "la discriminación" y "la intolerancia".
"Siento profundo dolor, pienso en aquellos que han perdido la vida en el atentado de Bruselas. Encomiendo las víctimas a la misericordia de Dios", dijo el papa durante la ceremonia de bienvenida en el aeropuerto de Tel Aviv.
Al hablar de su visita de tres días a Tierra Santa, iniciada el sábado por Jordania, el papa argentino manifestó el "deseo de que esta Tierra bendita sea un lugar en el que no haya espacio alguno para quien, instrumentalizando y exasperando el valor de su pertenencia religiosa, se vuelve intolerante o violento con la ajena".
El papa mencionó que el programa incluye una visita al Memorial de Yad Vashem, en Jerusalén, erigido en recuerdo de los 6 millones de judíos víctimas del Holocausto, "tragedia que se ha convertido en símbolo de hasta dónde puede llegar la maldad del hombre cuando, alimentada por falsas ideologías, se olvida de la dignidad fundamental de la persona, que merece respeto absoluto independientemente del pueblo al que pertenezca o la religión que profese", dijo.
"Pido a Dios que no suceda nunca más un crimen semejante, entre cuyas víctimas se cuentan también muchos cristianos y otras personas", agregó.
"Sin olvidar nunca el pasado, promovamos una educación en la que la exclusión y la confrontación dejen paso a la inclusión y el encuentro", afirmó.