La visita del Papa Francisco a Israel el 25 y 26 de mayo, estuvo llena de muchos momentos que no serán olvidados y de mensajes de paz y hermandad en el mundo.
El domingo 25 de mayo, el Papa fue recibido por el Primer Ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, quienes pronunciaron discursos de bienvenida que hicieron eco de las históricas relaciones que existen entre cristianos y judíos, un lazo que ha durado dos mil años.
El Primer Ministro, ponderó que "en el corazón del Medio Oriente, el turbulento y violento Medio Oriente, donde los cristianos con frecuencia son perseguidos, Israel es una isla de tolerancia. Salvaguardamos los derechos de todas las confesiones. Garantizamos libertad de culto para todos, y estamos comprometidos a mantener el status quo en los Santos Lugares de cristianos, musulmanes y judíos"
Por su parte, el Presidente del Estado de Israel, Shimon Peres, resaltó que la visita del Papa Francisco traía consigo "grandes augurios y esperanza para todos. Usted porta un mensaje de hermandad entre los pueblos, y amistad para todos. Nada enriquece más que el amor a la humanidad. Ciertamente, nuestros Sabios nos enseñaron que sólo el amor construirá Jerusalén".
Discurso completo del Presidente en el siguiente link:
El Papa Francisco manifestó en su discurso su deseo de que nunca más suceda en el mundo un crimen como el del Holocausto, en el que seis millones de judíos perdieron la vida y también muchos cristianos y otras personas. Asimismo, manifestó su pesar por las víctimas del atentado terrorista ocurrido en Bruselas.
Discurso pronunciado por el Papa Francisco a su llegada a Israel:
El 26 de mayo, el Papa Francisco visitó el Muro Occidental. Allí hizo una oración y dejó un papel en las ranuras del muro.
Ese mismo día, el Sumo Pontífice de la Iglesia Católica se reunió en el Centro Hecihan Shlomo de Jerusalén con el Gran Rabino Sefaradi, Yitzhak Yosef y con el Gran Rabino Ashkenazi de Israel, David Lau, quienes le obsequiaron una menorá.
El Papa Francisco hizo además, una visita no programada al Monumento a las Víctimas de Actos de Terrorismo en el Herzl a solicitud del Primer Ministro Benjamin Netanyahu. El Papa llegó al monumento después de poner una corona de flores en la tumba de Binyamin Ze'ev Herzl, el visionario fundador del Sionismo.Durante la parada en el monumento, el PM Netanyahu contó al Papa historias de las víctimas del terrorismo y le mostró la placa en memoria de las víctimas de los dos ataques terroristas en Buenos Aires. Además, el primer ministro informó al Papa sobre los tratamientos dados a palestinos de la Margen Occidental y Gaza en hospitales israelíes.
Al final de la visita, Netanyahu declaró: "Me gustaría agradecer al Papa Francisco por aceptar mi invitación a visitar el monumento a las víctimas del terrorismo. Expliqué al Papa que construir la malla de seguridad evitó muchas más víctimas que el terrorismo palestino, que continúa hoy, planeaba herir."
En el monumento a las víctimas civiles del terrorismo, el Papa Francisco declaró: "El terror es el mal absoluto. Viene del mal y causa el mal. Nunca más. Nunca más".
Un momento muy emocionante y que le dio la vuelta al mundo, fue la oración del Papa Francisco en el Muro de los Lamentos. Al finalizar de orar en el lugar más sagrado de los judíos, el rabino Abrahán Skorka y el líder musulmán Omar Abboud, salieron a su encuentro. Los tres se fundieron en un fuerte abrazo.
Una de las visitas más esperadas por el Papa Francisco, fue la realizada a Yad Vashem. La misma se llevó a a cabo en la Sala del Recuerdo, donde participó en una ceremonia conmemorativa. Allí saludó a seis sobrevivientes del Holocausto, pronunció un discurso y firmó el Libro de Visitantes de Yad Vashem.
Durante la ceremonia el papa fué invitado a reavivar la Llama Eterna y colocó una ofrenda floral en memoria de las víctimas del Holocausto. Al finalizar la visita se le hizo entrega de la réplica de una pintura realizada durante el Holocausto.
Yad Vashem concede una gran importancia y un significado especial para la visita del Papa Francisco, que esperamos fomentar una mayor conciencia del Holocausto en todo el mundo. En su discurso en Yad Vashem, el Papa hizo hincapié en el lugar trascendental de la Shoah en la experiencia humana, teniendo en cuenta la tragedia sin límites del Holocausto.
Hizo un llamamiento para promover la educación de los valores humanos, y para construir un mundo sin el antisemitismo en todas sus formas, y sin expresiones de hostilidad, la discriminación y la intolerancia.