Algunos de los “turistas” menos conocidos que visitan Israel por millones cada año, son las 300 especies de aves, que utilizan a Israel como una parada de descanso a medida que emigran en ruta desde África, Asia y Europa.

 

Para los observadores de aves internacionales que asistieron al Segundo Festival Internacional de Aves del Valle de Hula, a mediados de noviembre, es de conocimiento común que el Valle de Hula al norte de Israel es una de las escalas más importantes y sitios de invernada para las aves hacia el sur. A finales del otoño, hasta 40.000 grullas visitaron el Lago Hula para abastecerse de combustible, de acuerdo con Dan Alon, el director del Centro de Israel Ornitológico.

 

“Israel es un lugar ideal para las aves migratorias, ya que está situado a lo largo del Gran Valle del Rift, ruta migratoria, uno de los corredores más importantes del mundo para la migración de aves que une Europa, Asia y África”, explicó Alon. La ruta migratoria es una especie de autopista aérea que las aves usan cuando vuelan entre áreas de reproducción en el norte hasta las áreas de invernada en el sur, y ofrece una gran variedad de hábitats que son necesarios para las aves migratorias en su viaje.

 

“Las aves se detienen alrededor de la zona de Hula del lago Agamon a descansar, comer y beber, al igual que los viajeros humanos que utilizan hoteles, restaurantes y pubs”, dijo Alon. “Tenemos un máximo de 500 millones de aves y turistas que vienen a visitar el Valle de Hula cada año”, agregó.

 

Para Thomas Krumenacker, un periodista de Reuters desde Alemania, visitando Israel le da la oportunidad de ver otro lado del país, como un observador de aves.

 

“Es una oportunidad de estar aquí y ver el lado hermoso de Israel más allá del conflicto”, dijo Krumenacker Agencia Tazpit News.

 

“Vengo a Israel por lo menos tres veces al año para ver a las aves. Desde que era un niño, me ha encantado la observación de aves en Alemania y siempre me ha sorprendido por lo que las aves atraviesan durante la migración “, dijo Krumenacker que está trabajando en un libro sobre las aves en Israel. Su pájaro favorito es el Lark Abubilla, o la Alemon en hebreo, votó ave nacional de Israel en 2008 y una de las más raras de aves reproductoras Israel se encuentra en el Valle de la Aravá, en el sur.

 

“Israel es un país de inmigración y la migración”, bromeó Krumenacker. “Cuando vaya de regreso a Alemania, compartiré con mis amigos sobre la vida de las aves fascinantes que ví aquí.”

Otros entusiastas de las aves internacionales en el Festival de Aves de Hula Valley, y que fué organizado por el Centro Israelí de Ornitología de la SPINI, el Ministerio de Turismo de Israel, el Centro Internacional para el Estudio de la Migración de Aves en Latrun y la Fundación Abubilla, eran visitantes por primera vez a Tierra Santa.   Tristan Reed, un ecologista de noroeste de Inglaterra, quien también es conocido como el naturalista que tiene 24 especies de aves tatuadas en sus brazos, le dijo a la agencia de noticias Tazpit que “ha sido fantástico estar en Israel”.

 

“Ver a miles de grullas que salen de sus refugios en la mañana fue una experiencia muy emocionante para mí”, dijo Reed. “Es una oportunidad increíble para estudiar las aves en la gama más natural y personal.” 

 

 

Información de Anav Silverman de Tazpit News Agency.