Con la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Colombia e Israel, que se realizará el lunes en Jerusalén por los ministros de Comercio, Sergio Díaz-Granados, y Naftali Bennet, el embajador israelí en Bogotá, Yoed Magen, confía en que entre en vigencia lo más rápido posible. “Espero que sea a finales de este año o más tardar principios a del 2014”, dijo el diplomático. Las oportunidades no son solo en comercio, sino también en servicios e inversión, dijo Magen, y para la muestra un botón: una farmacéutica israelí, la productora de medicamentos genéricos más grande del mundo, fue persuadida por el presidente Juan Manuel Santos de invertir en Colombia.
¿Cuál es su opinión sobre el TLC?
El acuerdo es una excelente noticia para los dos países, para todos los que quieren hacer negocios, porque las dos economías son casi totalmente complementarias: la colombiana se basa más en sectores tradicionales, mientras que la israelí se basa en la tecnología y la innovación. No hay sectores que compiten y, por lo tanto, estamos llegando a una situación de gana-gana.
¿Cuál sería el sector colombiano que más se beneficiaría?
Creo que el sector agropecuario es el que más se va a beneficiar, por varias razones: Israel es un país que produce tecnología, soluciones sofisticadas para la agroindustria, que no necesariamente es barata y hace falta aquí en Colombia; con el TLC será más accesible para los agricultores colombianos.
¿Y qué otras razones hay?
Colombia es el cuarto exportador mundial de banano, e Israel es uno de los productores más importantes del mundo de semilla de banano; la cooperación en ese sector puede ser fantástica.
De hecho, una empresa israelí que desarrolla esas semillas creó un centro de investigación en la Universidad de Antioquia con la idea de desarrollar semillas aptas para el clima de Colombia y otros países de la región.
¿Y en comercio?
Hay buen potencial de ventas de Colombia a Israel en, por ejemplo, carnes, azúcar, panela, pulpa de fruta; el israelí es un gran consumidor de jugo natural y la pulpa va desde esta región.
Con el TLC, la pulpa colombiana va a ser mucho más competitiva.
¿Con qué países competirá Colombia en el mercado israelí de productos agroindustriales?
En pulpa creo que competiría, y sería más competitivo ahora, con Ecuador y Brasil. En carnes, con nuestros grandes proveedores, que son Uruguay y Argentina. Israel es un país con algo más de ocho millones de habitantes, pero la economía es del tamaño de la colombiana.
¿Los productos industriales colombianos también tienen oportunidades en Israel?
Creo que el sector textil y de ropa también se puede beneficiar; Israel normalmente compra en la India y China, y no sé qué tan competitivo es Colombia con los precios de allá, pero con el TLC va a ser mucho más competitivo. Aquí hay una moda que creo va a tener demanda en Israel. He hablado con diferentes industriales y me dicen que hay buenas posibilidades.
Lo que más le vende Colombia a Israel es carbón...
Colombia exporta el 30 por ciento del carbón que consume Israel, pero no queremos que el comercio entre los dos países se base en un producto, que un día sí y otro no, y ojalá podamos diversificarlo cuanto sea posible, explorando todas las oportunidades. Cuando el presidente Juan Manuel Santos estuvo en junio en Israel, llevó una delegación de empresarios que estuvo explorando el mercado israelí y regresó a Colombia con entusiasmo de empezar a hacer negocios.
¿Y en materia de inversión?
Sé que hay varias empresas muy interesadas en invertir aquí. De hecho, una de las cinco compañías más grandes de Israel ya se está instalando en Colombia. En su visita de junio, el presidente Santos se reunió con 280 empresas. Luego tuvo un almuerzo con las 20 más importantes de Israel. Estamos muy contentos con eso.
Israel también es fuerte en investigación médica y en producción de medicamentos. ¿Hay interés de invertir en Colombia?
En eso estamos. El presidente Santos manifestó el interés de que empresas de ese sector exploraran posibilidades en Colombia, que ofrece oportunidades muy buenas debido a su biodiversidad. Israel tiene la empresa más grande del mundo de producción de medicinas genéricas, se llama Teva, y el Presidente la persuadió de venir. El potencial existe, es cuestión de interesar a las empresas que vengan a hacer investigación y desarrollo aquí.
¿Cuándo cree que podría entrar en vigencia el TLC?
En Israel, el proceso de aprobación es relativamente rápido; aquí tiene que pasar por el Congreso, y como es un acuerdo que no perjudica a ningún sector y tiene muchos beneficios, creo que en pocos meses va a estar ratificado. Espero que para finales de este año o a más tardar a principios del 2014 entre en vigencia.
Jorge Correa C.
Economía y Negocios