• Sra. Patti Londoño Jaramillo, Viceministra de Relaciones Exteriores de Colombia
• Estimados Representantes del Gobierno Colombiano
• Respetados Senadores y Congresistas
• Estimados Representantes de la Alcaldía de Bogotá
• Embajadores y miembros del cuerpo diplomático acreditado en Colombia
• Estimados periodistas
• Queridos amigos de la comunidad judía
• Amigos de Israel en Colombia
Señoras y señores,
Gracias a todas y todos ustedes por estar aquí con nosotros, celebrando los 69 años de la independencia del Estado de Israel. Este es un día muy significativo para israelíes y judíos alrededor del mundo y celebrarlo con ustedes nos llena de regocijo.
Este año nuestra celebración es particularmente especial, dado que Israel celebra varios Jubileos entre 2017 y 2018, marcando aniversarios de eventos que modelaron la historia de Israel y del pueblo judío en la era moderna. Estos acontecimientos expresan el profundo vínculo entre el pueblo y la Tierra de Israel, y el camino de esperanza y resiliencia de nuestra nación.
Conmemoramos 120 años del primer Congreso Sionista convocado por el líder visionario Teodoro Herzl en Basilea, Suiza; celebramos 100 años de la Declaración Balfour, que reconoció el derecho del pueblo judío a restablecer la soberanía en su tierra ancestral; celebramos 70 años de la adopción de la resolución 181 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que aprobó el 29 de Noviembre 1947 la creación de un estado judío; celebramos 50 años de la reunificación de Jerusalén, la capital eterna del pueblo judío, y su fuente de fortaleza y su espíritu; y también celebramos 40 años de la visita histórica del presidente de Egipto Anuar Sadat, QEPD, visita que allanó el camino al primer acuerdo de paz entre Israel y uno de sus vecinos.
Señoras y Señores,
El Estado de Israel fue sólo un sueño hace poco más de un siglo, y su establecimiento fue un momento victorioso para nuestro pueblo. Habíamos estado dispersos por todo el mundo durante milenios. Los judíos se escondían a puertas cerradas por temor a los alborotadores, buscando refugio donde podían. Después, retornamos a nuestra tierra para construir un refugio seguro: Israel, que existía en las mentes y corazones de los judíos de todo el mundo, se volvió realidad, se volvió un faro de esperanza que arroja luz sobre los corazones anhelantes en algunos de los momentos más oscuros para el pueblo judío y para la humanidad en su conjunto.
A pesar de deber enfrentar enormes desafíos – una pequeña comunidad judía tratando de sostenerse mientras simultáneamente daba la bienvenida a los judíos expulsados de los países árabes y a sobrevivientes del Holocausto, y que al mismo tiempo enfrentaba la ira de millones de árabes en los países vecinos, hostiles a su propia existencia – Israel no solo salió triunfante sino que ha logrado prosperar.
A pesar de los desafíos geopolíticos, que son una constante en Oriente Medio y que cuya turbulencia sigue sacudiendo al mundo de hoy, Israel ha permanecido como una isla de estabilidad, un baluarte de libertad y pluralismo.
Hoy, Israel se ha convertido en una de las más enérgicas y ambiciosas sociedades, impulsoras del espíritu emprendedor e innovador global que contribuye diariamente a salvar y mejorar vidas en todo el mundo. Un país que ha dado a luz a algunas de las ideas más ingeniosas que benefician a la humanidad, Israel ha introducido grandes experiencias y emprendimientos como el kibutz y grandes inventos tecnológicos —desde el riego por goteo y la conservación y reuso de agua, a la cápsula endoscópica, de la seguridad cibernética hasta WAZE y Mobileye. Un país que defendía los derechos de las mujeres mucho antes de que estuviera de moda, que luchó por la sostenibilidad ambiental antes de que fuera un concepto en los asuntos internacionales.
La nuestra es de hecho una tierra de maravilla. Israel brilla con la luz y la esperanza de lograr lo imposible. Una democracia vibrante que manifiesta el renacimiento de un pueblo que a pesar de tener que lidiar con desafíos terrenales mira constantemente hacia el cielo para soñar con todo lo que aún está por construir y crear. Una nación con un gran corazón, que comparte sus avances con el mundo y que no piensa dos veces antes de enviar a sus héroes y expertos al otro lado del globo para ayudar a personas necesitadas, mientras que sin cesar busca la paz en nuestro vecindario inmediato deseando algún día alcanzar esa tierra prometida.
Señoras y señores,
Israel ha forjado y sigue forjando a lo largo de estos 69 años relaciones con cada vez más y más naciones que lo ven como un socio potente – un socio en la lucha contra el terrorismo de hoy en día, un socio en el desarrollo de la tecnología del mañana, un pais de pequeño tamaño que puede hacer una gran diferencia en muchas áreas importantes para ellos. En este sentido, el mayor cambio está ocurriendo en el mundo árabe: nuestros tratados de paz con Egipto y Jordania siguen siendo las anclas de estabilidad en la volátil zona de Medio Oriente, y por primera vez, muchos otros estados de la región reconocen que su enemigo no es Israel. Reconocen que Israel es su aliado frente a retos como la escasez de agua, frente a adversarios como Irán e ISIS, y con objetivos comunes como la seguridad, la prosperidad, el desarrollo y la paz.
En América Latina Israel cuenta con una amistad de décadas con Colombia, un aliado cercano y uno de nuestros principales socios comerciales en la región, con un intercambio sin precedentes entre ambos países en los últimos años. Un aliado con el cual las relaciones se han ido desarrollando extraordinariamente en varios sectores mientras se han abierto nuevos espacios fascinantes para nuestra cooperación. Israel ha estado al lado de Colombia en tiempos de conflicto y estará al lado de Colombia en tiempos de paz, apoyando a este país hermano a afrontar nuevos desafíos al igual que lo apoyó cuando enfrentaba los antiguos.
Nos encontramos a pocas semanas de terminar el trámite del Tratado de Libre Comercio entre los dos países en el Congreso Nacional, seguimos avanzando en la finalización en acuerdos de Cooperación Cultural, y de un memorando de entendimiento en ciencia y tecnología. En los últimos meses también se han firmado proyectos productivos con los Gobiernos Departamentales de Antioquia y César que con una inversión de 73 millones de dólares utilizarán alta tecnología israelí para la producción de alimentos y generarán centenares de empleos directos e indirectos.
Señoras y señores,
Nuestra historia es una historia de esperanza, “tikva’ ” en hebreo, como el título de nuestro himno nacional. La esperanza del pueblo judío es de dos mil años, como dice la letra de nuestro himno, y es de ser un pueblo libre en nuestra tierra: la tierra de Sión y Jerusalén. Jerusalén, el lugar de dónde vinimos todos los judíos, desde Mumbai a Bogotá y desde Alepo a Berlín; y el lugar al que vamos ya 3000 años, que son muchos años antes de la creación de la UNESCO…
Israel está aquí para quedarse, para crecer, para florecer, y todos nosotros somos los afortunados que llegamos a atestiguar y verlo todo con nuestros propios ojos asombrados.
Los invito a que levantemos las copas y brindemos todos por los 69 años de la independencia del Estado de Israel, por los próximos 69 años de progreso, potencia y prosperidad y por la hermandad entre la Republica de Colombia y el Estado de Israel.
“Lejaim”, salud!